Contenido principal

Municipalidad

Se hace camino al andar . . . . .

12/05/2020

En este tiempo de pandemia que atraviesa la humanidad, la certeza que nos queda es que todo es incierto.

En tiempo de Coronavirus lo único certero es lo incierto, aunque parezca un juego simbiótico de palabras.

Desde la clásica consulta a la inquietud después de haber pasado 40..., 50..., 53 días de aislamiento social; y hasta en esta denominación nos produce dudas, incertidumbres. Porque conceptualizaron como un confinamiento, y si bien uno permanecía mayor tiempo encerrado en sus casas, lejos de ese vocablo o al menos uno transfiere esa cualidad a otra situación.

La inquietud recurrente es ¿cuándo pasará todo? ¿Cuándo pase como seremos? ¿Más sensibles? ¿Más humanos? ¿Más solidarios? ¿Mejores? En fin, interrogantes que no tendrán respuestas hasta que se salga de esta crisis, de esta emergencia sanitaria inédita y globalizada, padecida por toda la humanidad. Y si bien se comienza a caminar, a transitar por una etapa de mayor flexibilidad, de más apertura, de permitir la realización de actividades comerciales, productivas, deportivas, recreativas, lejos aún estamos de salir de toda esta circunstancia.

Uno observa y desde aquel “lejano” marzo a hoy muchas cosas han cambiado, pero el juego aún no ha finalizado. La cuestión no ha sido superada, y haciendo ese recorrido en nuestra ciudad, pensamos qué distante quedó esa reunión, esa celebración aquel 7 de marzo para Honrar a las Mujeres, con el testimonio en el Mural, en la convocatoria y distinción a aquellas forjadoras, luchadoras, ese festival de culto a ellas, la remada, la aventura, la travesía del Isoró, la competencia ciclística y el triatlón Ciudad de Goya, que han significado una concurrencia impresionante de visitantes y locales poblando la ciudad.

Ahí comenzó a desatarse todo este cúmulo de medidas atendiendo a la protección de nuestra salud, de nuestra integridad, de proteger la Vida misma; y surgió desde ese tiempo la sensación de que esto pasaría pronto y aquí estamos con 53 días instalados, con conceptos adquiridos: aislamiento social, preventivo y obligatorio, la consigna quédate en casa, cuídate, cuídanos; reforzar hábitos de limpieza e higiene con agua y jabón, alcohol en gel y a eso sumamos el uso del barbijo, cubre boca, tapa boca, que contribuyó a poner en juego la creatividad en los diseños, con personajes favoritos, con dibujos, lisos, y en estos tiempos de virtualidad real: en 3D. Y lo incierto: ¿seguiremos con estas prácticas, estos métodos serán parte de la habitualidad?

En este tiempo “coronavirústico”, perdón por la licencia, nos han encapsulado todo: las emociones, la fe, los afectos, los abuelos y esto es lo único cierto, se han impedido los saludos afectuosos como abrazos, besos, se han cerrado (hoy se permite como refugio espiritual) las iglesias para evitar aglomeramiento y esas cuestiones sencillas se vieron afectadas. Desde una reunión familiar para celebrar el cumpleaños de algún integrante, el clásico 15 (excepto que sea la funcionaria de Mendoza) que se podrá realizar con la foto de este año a los 16, creemos; el bautismo de quien nació en esta época, quizás corretee por la capilla con sus padrinos en la fecha que reasignen para ese acontecimiento; la programada y anunciada Boda (aunque algunos dirán de la que se salvaron) reprogramar para… El traje de la novia mantendrá ese diseño, el traje del novio, le entrará en la nueva fecha. Por ahí se agrandó la familia y la incertidumbre, seguiremos juntos o los mal intencionados que podrán decir “aprovechá, esta es la oportunidad de salvarse”. En fin, son varias las cuestiones que provocan lo incierto de la situación, no quedan dudas que lo único cierto es que se atraviesa de la mejor forma posible, que son una luz de esperanza las flexibilizaciones, pero nadie puede garantizar cuando pasará todo esto. Mientras surgen estas ideas, en la radio se puede escuchar el poema de Antonio Machado, musicalizado y cantado por el “Nano” Serrat: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”.

Nunca es más cierto que ahora ese poema de Machado que dice ‘se hace camino al andar’.

“Todo pasa y todo queda/ pero lo nuestro es pasar/… yo amo los mundos sutiles/ ingrávidos y gentiles/ como pompas de jabón/… caminante son tus huellas/ el camino y nada más/ caminante, no hay camino/ se hace camino al andar/ Al andar se hace camino y al volver la vista atrás/ se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar...”.