Toda la velada artística en el Teatro Municipal se pobló de alegría, emociones, sentimientos que fueron revalorizando en el día de la Tradición, la Identidad de Un Pueblo, con su cultura su música, pero una nota singular la dio la presencia en el escenario de Los Sheridan y particularmente la historia contada con las melodías y acordes, además del relato emocionado de Lucas, el Hijo de Joaquín “El Gringo” Sheridan.
Dimensionada en la mirada retrospectiva del  joven músico, que se animó a describir: “este bandoneón quedo guardado en casa, se salvó de la tragedia, y me impulso a aprender y tener en él, presente al Gringo, este Bandoneón perteneció a mi padre, que lo había adquirido a otro talentoso, Ricardo “Richar” Scofano, quien a su vez se lo había conseguido de Mario del Tránsito “El Taita”, Cocomarola, “fue lo que se atrevió a expresar en palabras, porque después fue la música y los instrumentos, quienes con las melodías expresaron todo ese sentimiento guardado en el corazón de Los Sheridan.